Muelas del juicio: ¿para qué sirven y cuándo hay que extraerlas?
05 AgoLa extracción dental o exodoncia es un procedimiento que, como su nombre indica, consiste en extraer un diente de su alvéolo (el hueso que lo rodea y le brinda soporte).
Dicho esto, la extracción de las muelas del juicio es uno de los procedimientos más frecuentes en la consulta dental.
¿Qué son las muelas del juicio y para qué sirven?
Los terceros molares son comúnmente conocidos como cordales o muelas del juicio. Esto es así ya que su tiempo de erupción coincide con la «llegada de la madurez» en los jóvenes, apareciendo en boca aproximadamente a la edad de 18 años. Por lo tanto, son los últimos dientes en erupcionar.
Al tratarse de dientes molares su función consiste en masticar los alimentos, más específicamente en triturarlos, lo cual realizan junto a los primeros y segundos molares y los premolares.
¿Cuántas muelas del juicio hay?
Lo usual es que cada persona tenga 4 muelas del juicio, 2 en la arcada de arriba y 2 en la de abajo, estando situadas por detrás de los segundos molares.
Cabe destacar que también es posible que una o más de ellas no erupcione o no lo haga completamente. O, en su defecto, que lo haga en una posición incorrecta, tal y como te explicaremos en el siguiente punto.
¿Cuándo hay que extraer las muelas del juicio?
Al ser los últimos dientes en erupcionar, las muelas del juicio pueden quedar retenidas en el hueso. Esto sucede cuando no hay suficiente espacio en la arcada para que emerjan y se posicionen correctamente.
Ahora, cuando la retención es parcial (la corona se observa parcialmente en la encía) se puede desarrollar una pericoronaritis, que es una infección que afecta a la encía que rodea la corona. Esta circunstancia es, además, una indicación para la extracción del tercer molar.
Otras causas son: cuando hay dolor consecuencia de una caries profunda con gran pérdida del tejido dental, malposición de la muela del juicio, cuando hay quistes o tumores asociados, caries en la cara distal del segundo molar y reabsorción de dientes vecinos.
Usualmente, las muelas del juicio suelen extraerse antes de empezar el tratamiento de ortodoncia, especialmente cuando hay apiñamiento por falta de espacio. En caso de que los terceros molares aún no estén en boca también suelen extraerse para así evitar futuras complicaciones.
¿En qué consiste la extracción de las muelas del juicio?
Previo a la operación de exodoncia el odontólogo indicará la realización de una radiografía panorámica con el fin de evaluar la posición del molar (vertical, horizontal o inclinado hacia uno de los lados). También para conocer la longitud y forma de las raíces, es decir, si convergen entre sí o son divergentes.
Cabe destacar que el nivel de complejidad de la cirugía de las muelas del juicio depende en parte de la forma y posición del diente y sus raíces, y si ya está en boca o está retenido en el hueso. También es importante mencionar que días antes del procedimiento algunos dentistas prescriben antibióticos para prevenir el desarrollo de infecciones bacterianas.
En primer lugar, el odontólogo infiltra la anestesia, la cual puede acompañarse de sedación consciente si el paciente lo prefiere y solo si el odontólogo está capacitado para hacerlo.
Si la muela del juicio aún no está en boca es necesario realizar una elevación del colgajo. Para esto se hace una incisión que permite levantar la mucosa y el tejido conectivo que cubre el diente, luego se corta y retira un pequeño fragmento del hueso alveolar para que así el tercer molar quede expuesto y pueda ser extraído con pinzas o fórceps.
En algunos casos es necesario realizar una odontosección, lo cual consiste en dividir el diente en varias partes para facilitar su extracción, un ejemplo de esto sería cuando las raíces son divergentes entre sí.
Si el tercer molar ya ha erupcionado completamente el procedimiento es el siguiente: Luego de la anestesia, el molar se separa de los ligamentos que lo sujetan al hueso, a continuación se afloja con un instrumento llamado elevador y luego con movimientos cuidadosos pero firmes se extrae del alvéolo con un fórceps, aunque hay dentistas que prefieren hacer la extracción con el elevador.
Para finalizar se irriga el alvéolo con suero fisiológico y a aquellos pacientes a quienes se les realizó un levantamiento de colgajo se les sutura la zona de la herida.
Cuidados tras la extracción de las muelas del juicio
Luego de una extracción es fundamental que sigas el régimen postoperatorio indicado para favorecer la rápida recuperación, minimizar la inflamación y evitar las infecciones o que se abran los puntos de sutura.
- Muerde la gasa colocada sobre la zona de la herida durante 30 minutos.
- No escupas, no hagas movimientos de succión ni gárgaras ya que esto puede desalojar el coágulo de sangre.
- Mantén una dieta blanda la primera semana.
- No olvides realizar la higiene de la zona involucrada, pero hazlo con cuidado.
- Cumple el tratamiento analgésico indicado.
- Puedes usar bolsas de hielo para reducir la inflamación.
- No fumes durante al menos 4 días después de la intervención, ya que el calor generado afecta el proceso de cicatrización.
- Si presentas dolor prolongado o intenso, sangrado o fiebre, acude a tu dentista de inmediato.
Complicaciones tras la extracción de las muelas del juicio
Todos los procedimientos de cirugía oral pueden desencadenar complicaciones de menor o mayor grado, esto dependiendo del nivel de complejidad, la cantidad de tejido involucrado, si el paciente presenta alguna enfermedad, etc.
La mayoría de las exodoncias de cordales no causan mayores complicaciones, entre las más habituales podemos mencionar:
- Sangrado y/o dolor, ambos de leve a moderado.
- Inflamación/hinchazón de la zona comprometida y las adyacentes.
- Dificultad para abrir la boca y movilidad limitada de la mandíbula.
Entre las complicaciones más severas y graves tenemos:
- Alveolitis seca (exposición del hueso y nervios por desalojo del coágulo de sangre), cursa con dolor, mal aliento y retraso del proceso de cicatrización.
- Infecciones agudas, que puede cursar con un flemón o absceso.
- Sangrado excesivo que no se detiene.
- Dolor insoportable.
- Fracturas óseas.
- Lesiones de dientes adyacentes.
- Lesiones nerviosas.
- Osteomielitis (cuando la infección se extiende hasta el hueso subyacente).
Nº de colegiado: 20975/1558.
Especialista en Odontología y Estomatología con más de 25 años de experiencia en el sector y una extensa formación en la especialidad.
Experto en implantes, ortodoncia, periodoncia, odontopediatría, estética dental y endodoncia. Con certificaciones en dichas especialidades por la Universidad de Barcelona y la Universidad Complutense de Madrid.